By Evamaría Presas
La Desmotivación es el nombre con el que se conoce a un estado psicológico que afecta enormemente a la posibilidad de sentirse bien, felíz, saludable o placentero debido a que cuando se pierde la motivación (su antónimo) se siente como que toda experiencia carece de sentido, cayendo entonces en la apatía, en el desánimo, desinterés e indiferencia hacia alguna actividad particular o hacia todo en general, y en el peor de los casos a la vida en general. Cuando las personas están desmotivadas no quieren realizar tareas o las hacen de mala manera, lo que tiene efectos negativos para ellos mismos y en el entorno que los rodea, es como caer en un letargo, negativo para nuestras vidas.
El diccionario define a la desmotivación de la siguiente forma: “un sentimiento de desesperanza ante los obstáculos; o un estado de angustia y pérdida de entusiasmo, energía o motivación”.
Son muchas las causas por las cuáles se puede caer en la desmotivación, las más comunes suelen ser:
- Estar en una labor o trabajo equivocado
- Un cambio de deseos, o de prioridades o necesidades que no se satisfacen
- Cambio en las condiciones de las relaciones interpersonales o de trabajo.
- Caída sistemática de la autoestima.
- No ver resultados que tanto se anhelan, y por los que se lucha.
- Bajos niveles de energía física, falta de salud agotamiento.
- La influencia de otras personas, de pensamiento negativo y críticas, por lo general.
- El miedo, y los temores.
- El no tener conciencia o no saber exactamente lo que se quiere
- Conflicto de valores por no poder satisfacerlos sea por una situación en particular.
- La falta de autonomía.
- Frustración por perseguir o toparte con objetivos muy por debajo de tu capacidad.
- No tomar conciencia que para alcanzar grandes objetivos debe haber grandes esfuerzos, y por esto te das contra la pared constantemente.
- Hacerte un plazo irreal, excesivamente optimista para tus objetivos.
- Dejar que las circunstancias marquen el rumbo de tu vida y no tú, con ello de nada depende de uno.
El tema es que la desmotivación es un flagelo que nos ha azotado a todos. Todos tenemos o tendremos una cuota de desmotivación en algún momento de la vida, en cualquier área de ella, sin embargo nuestro enforque para manejarla es lo que nos diferenciará de los demás.